Este artículo ha sido publicado originalmente en es.boats.com.
Diego Yriarte nos hace una selección de cuatro veleros para los que están pensando en comprar su primer barco.
Si aún no ha decidido cuál será su primer velero, permítanos algunas sugerencias a la hora de elegir, porque no todas las personas tienen los mismo objetivos náuticos y porque solo habrá un primer barco en su vida.
Las personas que se inicien en la náutica han de ser consientes de sus primeros pasos en un mundo apasionante. Y a veces las pasiones nos llevan a actos locos… como tener un barco de madera, un Minitransat 6.50 o hacerse periodista especializado. El hecho no descarta un final feliz, pero la experiencia es clave para disfrutar con más intensidad y quizás sea mejor empezar por un velero que no plantee demasiados desafíos.
Navegar hacia el horizonte: en el pequeño pero grande Dufour 310 Grand Large el sueño se vuelve realidad.
Un barco de madera representa otro nivel de pasión y requiere de un presupuesto más elevado si hemos de pagar el mantenimiento, u horas y experiencia en madera si lo haremos nosotros mismos. Por su parte, un barco de regata extremo exige un conocimiento elevado de navegación para no acabar usándolo de sombrero. Además, los barcos clásicos y los de regata no se destacan por su comodidad interior.
Así que lo primero que tenemos que pensar es nuestro futuro plan de navegación, si queremos un barco para disfrutar en crucero o en regata, aunque podemos optar por uno que nos permita combinar estas dos actividades. Siempre digo que un barco tiene un propietario y varios tripulantes, y es muy enriquecedor navegar en el barco de otra persona y hacer las primeras millas acompañado de alguien con experiencia. Particularmente si es en regata, el aprendizaje para quien acaba de sacarse el título es excelente, intensivo y cautivador. En una regata siempre se da la suma de situaciones en las que hemos de resolver la velocidad, la maniobra o diversos inconvenientes que, en la vela de crucero, son esporádicos pero la experiencia es clave para resolverlos sin daños.
Otra de las decisiones clave antes de la compra es tener claro nuestras capacidades a la hora de realizar tareas de mantenimiento
Empezaremos por un plan de salidas diurnas con el objetivo de sumar millas por lo que bien nos vale una embarcación pequeña, en lo posible con una cabina y un fogón, para incorporar un poco de magia a la pasión.
Si el presupuesto recomienda un barco usado le resultarán interesantes los artículos de nuestra sección de consejos.
20 pies
A la hora de comprar un barco nuevo, en el contexto actual del mercado hay poca variedad de modelos de 20 pies. Bénéteau ofrece dos opciones de la gama First de 20 y 25 pies con un precio base de 21.800 €.
El Bénéteau First 20 cuenta con los últimos adelantos en diseño en una eslora reducida. Foto: Bénéteau.
Cuentan con la ventaja de tener una configuración actualizada en cuanto a formas de casco, aparejo y apéndices, incorporando dos palas de timón que ofrecen una excelente estabilidad de rumbo para esta eslora. El interior es un ambiente único, una pequeña cocina a babor y la mesa de cartas a estribor, dos asientos a cada banda con una mesa de alas abatibles y una cama triangular en proa. La opción de transporte por carretera abre otro sin fin de posibilidades.
Si el presupuesto es un problema es posible conseguir barcos similares en el mercado del usado, como el Jeanneau Sun 2000, casi la mitad de precio o aun más baratos, pero hemos de tener en cuenta visitarlo con un profesional que nos asesore sobre su estado.
Con perfil regatero
Hay muchas personas que comienzan a navegar después de ser invitadas a participar en una regata, sin tener la menor idea . En este caso la atracción suele ser muy fuerte, implacable. Si después de haber obtenido la correspondiente titulación el afán de competición sigue intacto y es capaz de armar una tripulación de cinco o seis personas, sería interesante que vea un J80.
Para quienes se inclinen por la competición, el J80 y sus regatas son la mejor escuela. Foto: Diego Yriarte.
Es un barco de ocho metros, transportable, con un interior espartano, es un barco de regatas, no hay duda; pero de maniobra muy fácil y eficiente. Por otra parte, hay varias flotas en todo el litoral español que compiten a nivel nacional e internacional, en muchos casos con la participación de profesionales y si su deseo es navegar haciendo carreras, ésta es una excelente clase monotipo con la que aprender a navegar y a competir. La aparición del nuevo J70 ha propiciado el movimiento del mercado del usado de J80 con un precio que ronda los 20.000 €.
Mayor oferta
Entre 8 y 12 metros la oferta es mucho más amplia. La mayoría de los astilleros de renombre comienzan su gama alrededor de los 10 metros y en el mercado del usado hay gran variedad de modelos de astilleros actuales y muchos que ya no existen pero han dejado un importante legado. Los precios varían según la antigüedad y estado, al cual hemos de prestar mayor atención. En un par de décadas el diseño y los métodos constructivos han evolucionado muchísimo hacia barcos más ligeros, seguros, confortables y fáciles de navegar. Las mejoras en los diseños de competición llegan cada vez más rápido a los barcos construidos en serie y los astilleros adaptan el diseño de interiores para hacerlos más cómodos.
La diferencia más apreciable en las últimas décadas ha sido el aumento de la amplitud de la manga y volumen en popa. El espacio es la materia prima de los diseñadores de interior que han sabido aprovecharlo.
Los astilleros también han sabido mantener la dualidad crucero-regata y las posibilidades de personalización hacia una opción u otra, y también el punto medio, de las embarcaciones que participan en regatas sociales.
El diseño actual requiere espacios luminosos en el interior y cada vez se instalan más superficies transparentes en casco y cubierta. Foto: Dufour.
Un buen ejemplo actual es el Dufour Grand Large 310, un barco de alta performance de navegación y comodidad para el crucero. Es un muy buen ejemplo de sobrio diseño actual con unos acabados acordes. En menos de 10 metros de eslora, el volumen interior ha sido aprovechado al máximo y permite compartimentar las cabinas dobles de proa y popa y un baño completo. Las comodidades de la zona común del salón y la cocina nos permitirán travesías más extensas.
Su precio, alrededor de 140.000 € deja un campo de opciones muy amplio en el mercado del usado.
Soñar despierto
Antes, era habitual comenzar a navegar en un barco pequeño para adquirir la destreza suficiente para, con escasos medios, aumentar de eslora y de riesgos. Los avances tecnológicos nos permiten minimizar esfuerzos y facilitar la maniobra: malacates y winches eléctricos, hélices de proa, electrónica, enrolladores, etc. En la actualidad se pueden maniobrar barcos con tripulación reducida en casi todas las esloras. Por dar un claro ejemplo, la regata Vendée Globe se disputa con embarcaciones de 60 pies de eslora que dan la vuelta al mundo con solo un tripulante y sin escalas.
El RM 1270 es un barco con el que soñar largas travesías, ha sido concebido con ese objetivo, si lo comparte, es una excelente opción. Foto: Yves Ronzier.
El patrón ganador de la anterior edición, François Gabart, está construyendo un RM 970 para su uso personal. Hay personas que se inician en la vela con ideas muy claras y un buen presupuesto. Para quienes deseen navegar de crucero de forma muy estable y segura, sin perder eficiencia los RM son barcos concebidos con este objetivo. Personalmente me agrada el RM 1270, una eslora controlable para poca tripulación, unos interiores cómodos y eficientes. El aparejo con dos velas de proa enrollables es una opción muy inteligente para quien piense en travesías de varios días. Es un barco que se puede equipar con instrumental, ganar experiencia y quizás, algún día, dejar tierra por un tiempo.