Este artículo ha sido publicado originalmente en es.boats.com.
Jordi Maseras nos explica como podemos eliminar o minimizar ruidos y vibraciones en nuestro barco.
Seguro que en más de una ocasión hemos deseado olvidarnos del ruido que producen nuestros motores bajo cubierta. Todos los ruidos se deben a fenómenos vibratorios que se transmiten a través del aire y, por tanto, para combatirlos, es preciso eliminar las vibraciones, rebajarlas o impedir que puedan alcanzar nuestros oídos en la medida de lo posible.
Forrar el compartimento motor con espuma de célula cerrada de alta densidad es imprescindible para reducir sensiblemente la transmisión de las vibraciones. Foto: Jordi Maseras.
Los motores vibran de forma diferente en función del número de cilindros, su disposición y del tipo de combustible que utilizan para su funcionamiento. Así, si los cilindros están dispuestos en línea producirán más vibraciones que si están montados en V y, lógicamente, si el combustible usado es el gasóleo será más ruidoso que el de gasolina, por trabajar a una compresión muy superior.
Los motores mal cuidados producen más ruido que los que están en perfectas condiciones y a punto. Las juntas de culata estropeadas, la holgura de los émbolos, el desajuste de las válvulas, los engranajes y cojinetes en mal estado, etc. son causas de ruidos que sólo eliminaremos con la debida reparación. No obstante, aún suponiendo que el motor está en perfectas condiciones, sigue existiendo un alto nivel de ruido contra el que podremos luchar para reducirlo considerablemente.
También la correcta alineación del eje de la hélice con el motor, así como el buen estado de los silent blocks será fundamental a la hora de eliminar las vibraciones. Foto: Jordi Maseras.
El correcto aislamiento del motor con su bancada a través de soportes elásticos o silent blocks, los acoplamientos elásticos entre el motor y el eje de la hélice así como su correcta alineación, el perfecto aislamiento del compartimiento del motor, la aspiración del aire y, sobre todo, el escape, son todos los puntos en los que podremos incidir para que nuestras singladuras sean más placenteras y relajadas.
Una correcta ventilación de la cámara de motores no sólo servirá para el correcto funcionamiento de los motores sino también para minimizar los ruidos transmitidos a través de las vibraciones. Foto: Jordi Maseras.
Uno de los puntos mencionados anteriormente y en el que seguramente pocas veces hemos pensado es la aspiración. Todos los motores necesitan un gran volumen de aire, muy superior al que nos imaginamos, para su funcionamiento. Como ejemplo diremos que un motor de cuatro tiempos con una cilindrada de 2.000 cc, girando a 2.500 rpm, necesita un litro de aire por cada giro de cigüeñal, lo que equivale a 2.500 litros de aire por minuto, o lo que es lo mismo, 150 metros cúbicos por hora. Por lo tanto, las aberturas para permitir la entrada de aire a la cámara de motores deben ser acordes con estos volúmenes para evitar silbidos y vibraciones.